Primero hicimos 2 bizcochos de chocolate (receta aquí) en un molde redondo.
Entre bizcocho y bizcocho pusimos medio bote de mermelada de fresa.
Para la decoración usamos:
- chocolate negro para postres
- mantequilla
- leche
- mascarpone
- un lacasito azul
- un poquito de mermelada de fresa
- una bolsa de plástico
- una tira de cartulina
Dibujamos con el cuchillo el perfil de la luna en la tarta, cortando como 1cm de hondo, y clavamos la cartulina siguiendo este perfil.
Preparamos la cobertura blanca, simplemente mezclando el mascarpone para que quede fácil de untar, sin añadir nada o como mucho unas gotas de leche. Lo extendemos con un cuchillo largo liso.
Truco: usarlo más espeso para untar los laterales, y añadir unas gotas de leche para extender la parte de arriba.
Para la zona oscura, fundimos el chocolate negro con una cucharadita de mantequilla y un poquito de leche. Extendemos con un cuchillo largo.
Quitamos con cuidado la cartulina que separa las 2 zonas ANTES de dejar solidificar la cobertura.
Metemos el chocolate en una manga o en una bolsa de plástico a la que le hacemos un agujerito en la esquina. Dibujamos todo el borde de la luna.
Los labios son un poco de mermelada y el ojo es un lacasito.
Terminamos de dibujar con el chocolate el ojo, la ceja, la nariz y los labios.
Ha quedado guapa ¿verdad?
Y para terminar un consejo: hacedla el mismo día del cumple, nosotros la hicimos el día anterior, la metimos en la nevera sin tapar, y ohhhhh ¡¡¡el mascarpone se agrietó!!!