No sé vosotras, pero yo con luz no puedo dormir. Y por esta ventana chiquitina del baño - sin persiana - en verano antes de las 7 de la mañana me da el sol en plena cara.
Tras unos años de apaño poniendo una toalla, le he cosido una cortina.
Usé un retalito azul oscuro que quedó de la mesa-mercadillo del Mallorca Cosidores Weekend. Doblado en 4 daba justo la medida de la ventana y tapa bien la luz.
Para mantener bien la forma, tanto arriba como abajo, unas maderas (reutilizadas de las asas de una bolsa) que son de la medida de la ventana. Van simplemente pasadas, así las puedo quitar cuando quiera lavarla.
Para colgar, un resto de camiseta. Así no tengo que agujerear ni nada.
Me gusta especialmente que cuando abro la ventana durante el día, la cortina cuelga y deja pasar la luz.
:O :O :O Que ingeniosa, vaya modo de montar la cortinita que se saca y pone, jiji, me encanta. Yo también odio la luz para dormir, como aparezca un rayito de luz se me abre el ojo y solo veo eso, jajajaja.
ResponderEliminarBesote!!!!