Reescribiendo un cuento

A mi nena y a mí nos encantan los cuentos, tiene un montón de libros, los mira muchísimo, y le encanta que se los cuente. El peque por ahora más bien se dedica a sacarlos de la estantería y esparcirlos por el pasillo... poco a poco.

Los cuentos que tenemos no son los típicos de siempre; en casa no están Caperucita, ni Blancanieves, ni nada así. Entre nuestros preferidos están Historias de ratones, La vaca que puso un huevo, A qué sabe la luna...

El otro día contamos el libro La casa más grande del mundo, y al llegar a la parte en la que el caracol se muere y su casita se rompe, uffff!!!! vaya final! ni suavizándolo ni nada. El libro es bonito, las ilustraciones preciosas, pero por culpa del final nunca lo miramos.

Esta vez decidimos no dejarlo pasar, y cambiar el final del libro.

Juntas, pensamos qué final nos gustaría.
Pintamos y coloreamos la nueva ilustración...

Como la casa es tan grande que no la puede mover, el caracol la abandona y se va con una casita pequeña.
Lo amarillo de abajo son huevos que ha puesto el caracol.

...y escribimos juntas el texto:
El caracol dejó la casa grande. Se compró una casa nueva pequeña y vivió feliz y pudo mover la casa siempre.

El cargolet va deixar la casa grossa. Es va comprar una casa nova petita i va viure feliç i va poder moure la casa sempre.

La peque, que tiene mucho interés en las letras, quiso escribirlo casi todo ella, así que se lo escribí en el ordenador y ella fue copiando.

Lo pegamos con celo encima de la ilustración que tanta pena le daba del libro (la casa del caracol toda rota) y del texto que la acompañaba.

Ha quedado precioso verdad? y muy especial.

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